La clave para tener una piel perfecta reside en una correcta limpieza. Para realizar una limpieza facial es casa como la de un centro profesional deberemos seguir una serie de pasos obligatorios que nos ayudarán a mantener la piel de la cara hidratada y radiante.
Aunque no te maquilles necesitas limpiarte la piel de la cara en profundidad cada noche. La polución, el sol, el frío o el viento son factores externos que agreden las capas exteriores de la piel. De esta manera, limpiaremos los poros de suciedad y grasa, y nuestra piel estará preparada para recibir el resto de tratamientos. Solo será necesario realizar esta limpieza profunda por las noches.
Después de limpiar tu rostro, toca aplicar una loción tónica o humectante. Esto dependerá del tipo de piel que tengas. El secreto de una piel radiante reside en la limpieza y en el cuidado diario.
Después de limpiar y tonificar llega el momento de tratar. Cada edad o cada tipo de piel necesitan cuidados específicos. Por ejemplo, si quieres prevenir la aparición de arrugas, te recomendamos que utilices una crema . En cambio, si tu problema es la sequedad, prueba con una loción o un sérum.
Una vez por semana aplícate una mascarilla para limpiar o hidratar de manera más intensa.. Así, combinando la acción de varias mascarillas, tu piel mejorará notablemente cada día.
Utiliza una crema muy hidratante y, sobre todo, con protección solar. Ya conoces el dicho: el mejor antiarrugas es un protector solar. Actualmente, podemos conseguir productos que son una auténtica navaja suiza de la belleza. Con una sola crema podrás hidratarte, corregir pequeñas imperfecciones y protegerte de los efectos nocivos del sol en la piel.
Es fundamental proteger e hidratar el contorno de ojos y de la boca. Son zonas donde la piel es muy fina y sensible. Además, son las primeras zonas en las que aparecen los signos de la edad. Utiliza una crema diferente para estas dos zonas. Deberá ser más fluida y ligera para una correcta absorción. Puedes encontrar cremas para el contorno de ojos con protección solar, mucho más recomendables para usar a diario.
Hay dos zonas relacionadas con el rostro a las que apenas prestamos atención… hasta que ya es demasiado tarde. Hablamos del cuello y el escote, esos grandes olvidados. Si te fijas en las indicaciones de las cremas puedes leer que se tienen que aplicar en rostro, cuello y escote. Esta piel es muy delicada y le afectan los agentes externos mucho más que al resto del cuerpo. No escatimes en hidratante y no te olvides de estas zonas. Con el paso del tiempo te lo agradecerán.
Es conveniente que te hagas en casa una limpieza más profunda con algún limpiador facial, especialmente por las noches. Por ejemplo, los cepillos eléctricos para la piel son una de las tendencias más populares entre las mujeres de medio mundo. Ayudan a dejar la piel suave y perfectamente limpia con el mínimo esfuerzo. Tiene la ventaja de servir para todo tipo de pieles gracias a sus discos intercambiables. Son especialmente útiles para todas a aquellas que se maquillen a diario, ya que eliminan hasta seis veces más residuos sin esfuerzo, dejando la piel tersa y brillante.
No nos cansaremos de repetirlo: no te olvides de limpiar tu piel a diario. Ese es el único secreto para lograr una piel hidratada, más joven y cuidada. Tampoco debes olvidar beber mucha agua. Con dos litros de agua al día ayudarás a tu piel a mantenerse joven por más tiempo.
Para finalizar, recuerda que debes usar productos específicos para tu piel. Hay mujeres con cuarenta años que parece que tienen veinte. Puede que tengan predisposición genética, pero si les preguntas cuál es su secreto te dirán que usan protección solar a diario (sí, en invierno también).
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